Evangelio del día: «Jesús cura a muchos y multiplica los panes». Mt15,29-37

Acto de apertura del 75º aniversario de Diocesanas-Jesús Obrero "Egibide"

Mañana miércoles, 18 de octubre, la Catedral Santa María de Vitoria acogerá el Acto de Apertura del 75º Aniversario de Diocesanas-Jesús Obrero "EGIBIDE".

18:00 horas: Eucaristía presidida por el obispo de Vitoria, D. Juan Carlos Elizalde

18:45 horas: Acto social con intervenciones en el Pórtico de la Catedral Santa María  y lunch a cargo de la Escuela de Hostelería EGIBIDE-Mendizorrotza.

Se contará también con la participación del Coro Oskarbi, perteneciente a Musikalde Elkartea.

Egibide es hoy  la unión de dos proyectos educativos que nacieron en la década de los 40 en la ciudad de Vitoria: Diocesanas y Jesús Obrero.

Historia de DIOCESANAS

La “Escuela de Aprendices de Acción Católica” inicia su andadura bajo la dirección de D. Pedro Anitua, sacerdote diocesano, con 25 alumnos y 2 profesores, en una buhardilla del barrio del Prado donde se impartían cursos de mecánica y ebanistería en 1942. En la década de los 50 se crean las Escuelas Profesionales Comarcales.
En 1954, el obispo D. Bueno Monreal erigió la Obra Diocesana de Formación Profesional, nombrando como primer director al recién ordenado sacerdote diocesano D. Pedro María Ortiz de Zuñiga, ingeniero de Caminos, Canales y Puertos.
En 1960 se inaugura el campus de Nieves Cano; en 1970 el de Arriaga; en 1974, la Escuela Profesional y del Hogar para la Mujer -fundada treinta años antes- se traslada de Villa Nieves a la Fundación Molinuevo; en 1982 se inaugura la Escuela de Hostelería en el Palacio Escoriaza- Esquivel que ocho años más tarde se traslada a su actual ubicación, los frontones de Mendizorrotza.
En 1995 recibe la nueva denominación “DIOCESANAS” y en años posteriores se implanta la ESO, las nuevas modalidades de Bachillerato y la nueva FP. En 2004 se obtiene la Q de Oro y en 2005 la certificación medioambiental EKOSCAN.

Historia de JESÚS OBRERO

En 1945 nace Jesús Obrero de la mano del P. Demetrio Ruiz de Alburuza como “obra educacional a favor de los pobres, para proporcionarles niveles culturales, humanos, sociales, económicos, profesionales, cívicos y religiosos”. Bajo el mecenazgo de Doña Felicia de Olave se adaptó el edificio del Patronato de Ntra. Sra. Del Pilar. Cinco jesuitas, cuatro profesores seglares y noventa y ocho alumnos (veintitrés de ellos huérfanos de guerra) componían esta primera Comunidad Educativa.    En 1959 La Caja Provincial de Ahorros, patrocinaría a las Escuelas Profesionales “Jesús Obrero” y las consideraría en lo moral, docente y económico, con carácter permanente como Obra filial.

En 1965 Jesús Obrero adquiere una nueva forma jurídica, la de Fundación Benéfico Docente, con la participación de la Diócesis de Vitoria, la Caja Provincial de Álava, la Diputación Foral de Álava y la Compañía de Jesús, que mantiene la responsabilidad de su gobierno.    Con motivo de las bodas de oro de la institución, en 1995 Jesús Obrero recibe la medalla de oro de la ciudad. En 2005 se obtiene también la certificación medioambiental ISO 14.001:2004, en 2006 se obtienen la Q de Oro del modelo EFQM y la certificación en el EMAS (inscripción en el sistema comunitario de gestión y auditorías ambientales) y en 2012 la ISO 9001:2008.

HOY, EGIBIDE

El Obispo de Vitoria, D. Miguel Asurmendi, firmó el 31 de mayo de 2012 la escritura de integración de Diocesanas y Jesús Obrero, por la que se constituyen en un centro único cuya titularidad queda bajo la denominación jurídica de “Fundación Diocesanas-Jesús Obrero Fundazioa”. Se materializa así la creación de una entidad referencial en el entorno educativo alavés con un liderazgo sólido en el sector de la Formación Profesional. En este centro de Kristau Eskola, 450 educadores forman a más de 7.000 alumnos y alumnas, convirtiéndose en el mayor centro educativo del país.

Esta Fundación sin ánimo de lucro, inspirada en los principios del humanismo cristiano y en la Doctrina Social de la Iglesia Católica, tiene por objeto los siguientes fines:

    1) Promover, instituir y dirigir principalmente Centros de Formación Profesional y de Educación Secundaria, en todos sus grados y ramas de actividad, con especial atención a la dimensión humana y cristiana. No obstante, no queda excluido ningún grado ni género de Enseñanza si el Patronato estima conveniente su implantación.

    2) Impulsar la impartición de estudios relacionados con la actividad industrial, profesional y comercial para contribuir al desarrollo de la economía y de la creación de empleo.

    3) Contribuir a una Formación Profesional proyectada especialmente hacia la investigación, el desarrollo y la innovación.

    4) Reforzar la relación entre la docencia y las empresas de nuestro entorno a fin de favorecer la inserción laboral de los alumnos y fomentar la competitividad de las empresas alavesas.

    5) Facilitar la inserción socio-laboral de jóvenes en riesgo de exclusión social o con especiales dificultades de contratación mediante una formación técnica profesional adaptada a sus características.

(Fuente: http://www.egibide.org)

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