Así fue la Jornada de Puertas Abiertas del Seminario
En la tarde del jueves, 26 de septiembre, el Seminario de Vitoria acogió una Jornada de Puertas Abiertas, desde las 18:00h. Cerca de 500 ciudadanos acudieron a esta cita para conocer el lugar donde se forman los futuros sacerdotes de Vitoria. La mayoría de ellos no conocía las entrañas de este impresionante edificio, obra del beato Pedro de Asúa, arquitecto diocesano y sacerdote asesinado al inicio de la Guerra Civil por su fe en Cristo.
El Obispo de Vitoria, Mons. Juan Carlos Elizalde, fue el encargado de dar la bienvenida a los cientos de personas que se agolpaban en las escalinatas centrales del 'hall' principal. Tras él, el rector del Seminario, D. Unai Ibáñez, trasladó a los presentes la importante reforma que se ha acometido y cuyos asistentes serían los primeros en verlas de manera pública.
Susana Aréchaga, delegada episcopal de Patrimonio Histórico-Artístico y Documental, le siguió en el turno de palabra para dar una breve explicación de la historia de este lugar cuya primera piedra se colocó en 1926 y a cuya inauguración vino el Nuncio del Papa y el Rey Alfonso XIII, siendo todo un acontecimiento de relevancia en la ciudad y en la provincia.
Tras estas intervenciones primeras, todos los asistentes se trasladaron al ala izquierda de la primera planta para proceder a la bendición de la nueva y remodelada zona, en la que además del Obispo, han participado seminaristas y el rector.
Sobre las 18:30h se bendecían las nuevas dependencias que han sido adaptadas para acoger las habitaciones de los seminaristas, respetando así la idea y proyecto original del beato D. Pedro, artífice de este Seminario. Después de la solemne bendición con el hisopo por parte de Mons. Elizalde, los cientos de personas comenzaron a descubrir estas estancias así como otras dependencias en las que estudian, viven, celebran y rezan los actuales 25 seminaristas que hay en la Diócesis de Vitoria.
Sin duda, un éxito de asistencia y una sorpresa grata de muchos que no conocían este singular e histórico edificio quienes, móvil en mano, han querido inmortalizar la belleza del lugar.