César Trapero
Otra vez estamos por aquí con este espacio que pretende acercarlos a la vida de jóvenes creyentes y comprometidos con la fe a través de sus testimonios. En esta ocasión tenemos el privilegio de conocer más de cerca a César Trapero, un joven de Vitoria-Gasteiz, de 30 años de edad, que está cursando un grado en Realización Audiovisual y Espectáculos y aparte trabaja como gestor administrativo en la clínica Dental Arca, en Vitoria. Esperamos que disfruten.
¿Cómo conociste a Jesús?
Descubrí a Jesús desde bien pequeño, en la guardería y primer curso de primaria. Recuerdo que era una escuela pequeña pero muy acogedora, con parque interior muy bonito y un grupo de monjas que me educaron bajo la gracia de Dios. En segundo de primaria llegué al colegio Santa María Marianistas. Ahí fui creciendo en mi fe hasta los 18 años, cuando me gradué. De esta etapa recuerdo mucho las charlas sobre el Evangelio por las mañanas, las misas semanales, y mi primer contacto con el Señor gracias al grupo de jóvenes ‘Elkarbidea’. Esa fue mi primera toma de contacto en la que me di cuenta de lo bonita que es la vida caminando junto a Él. Con ellos, aparte de acercarme más al Señor y a los demás, aprendí mucho sobre su historia. Esa base que recibí durante tantos años me sirvió para crecer como persona.
Es verdad que, pasados los años, después del colegio, mi fe y mi devoción hacia el Señor mermaron bastante y reconozco que fui un cristiano no muy practicante.
¿Cómo descubriste tu vocación?
Prácticamente hace dos años, me di cuenta del verdadero significado de lo que es ser un cristiano: de su vida, de la siembra, de dar hacia fuera y recibir hacia dentro. Ahora me siento único, libre y lleno de energía para dar a los demás. Estoy muy contento con mi situación actual. Encontré mi vocación cuando de verdad, aparte de escuchar a mi difunto abuelo, decidí demostrarle que podía ser una versión de él y cuidar de mi familia. Me dio la fuerza que necesitaba para salir de mi zona de confort y abrirme a Dios de una manera pura.
Además de esto, tuve la suerte de conocer a la que a día de hoy es mi pareja. En muchas ocasiones ella es la que tiene la iniciativa de ir a actividades. Guiándome de ella he logrado sentir desde lo más profundo de mi corazón el mensaje del Señor. Además, los meses de confinamiento me sirvieron para conocer a un Dios personal: sin citas para el resto, centrado en mí y dándome conversación y respuestas que no podría explicar.
¿Cuáles barreras has tenido que derrumbar por el hecho ser cristiano y/o vivir tu vocación de cara a la sociedad, a la familia?
Al principio tuve barreras para seguir hacia delante pensando en el qué dirán, tanto mis amigos como mi familia. En ese momento, yo mismo me pregunté, ¿qué estoy haciendo acudiendo a misa y rezando? Me sentí solo al no tener a nadie a mi lado que compartiese esas inquietudes. Creo que es una etapa que algunos pasamos para darnos cuenta del verdadero significado de seguirle toda nuestra vida. En mi caso, una vez que lo superé, me volví una persona fuerte a la que nada de estas cosas le han impedido gritar a los cuatro vientos que Él es todo para mí.
¿Qué piensas que se puede mejorar en la relación de los jóvenes con la iglesia?
Unos jóvenes sin tantos prejuicios, sin miedo a lo que puedan pensar de ellos, involucrados con la iglesia y los más necesitados. Jóvenes de hechos y palabras orgullosos de lo que quieren conseguir y acompañados por el resto de personas que sigan la palabra de Dios.
¿Cómo ves la realidad de los jóvenes aquí en Vitoria? ¿Qué esperas de este momento de la Iglesia con los jóvenes?
La realidad en nuestra ciudad es que los jóvenes están dormidos. Algunos están esperando ese “buenos días” de alguien que les despierte y otros están sin intención de levantarse. Espero una iglesia más comprometida empezando desde las ciudades, diócesis y colegios donde todos remen a la par y poder ayudar en el acompañamiento de estos. La primera propuesta es escucharnos los unos a los otros. Exponer nuestras ideas, dejar salir nuestra semilla para que otro pueda recogerla y nutrirse un del otro.
Un mensaje a los jóvenes para que se animen a ser cristianos, a conocer de Dios:
Él siempre está a nuestro lado, escuchándonos en las buenas y en las malas. Cediéndole unos minutos al día, a veces hasta sin darnos cuenta, nos acercará a los demás y a nosotros mismos para sacar esa mejor versión de nuestro interior.
Si supieras que te quedan 24 horas de vida, ¿Qué harías, a quien llamarías, dónde irías?
Me despertaría pronto para preparar un café y un rico desayuno y desayunaría con mi pareja. Al terminar, me ducharía y me pondría una ropa elegante, me sentaría en el sofá y me despediría de mi familia. Después saldría con ella y me dejaría sorprender por las calles de Madrid haciendo todas esas cosas que siempre me han dado vergüenza. Terminaría el día yendo al Santísimo a rezar y en cuanto saliese abrazaría a mi novia.
Conoce un poco más a César…
Tu lugar favorito: Una puesta de sol en el Castillo de Sancti Petri
Un sueño por cumplir: Formar una familia
Persona que admiras: Mi madre
Una película: Posdata te quiero, todos los días de mi vida, Religiosas y el nombre de la rosa
Un actor/actriz: Eddie Murphy
Un libro: Palmeras en la nieve
Un santo: San Ignacio de Loyola
Un poeta: Pablo Neruda
Un sentimiento: Amor
Una canción: Ojalá que llueva café en el campo
Un color: Azul
Una comida: Arroz a la cubana
Un lugar: Roma
Una frase/refrán: En la vida arrepiéntete de las cosas que has hecho y no de las que has dejado por hacer.
Un valor: Humildad
Actualmente formo parte del equipo de la Pastoral con Jóvenes de Vitoria. He participado planificando las actividades que realiza el Grupo Gazteok, que es un conjunto de gente joven que asiste a las diferentes reuniones, charlas y horas santas compartiendo esos momentos con el Señor. También, colaboro en la comunicación del Grupo Gazteok. Además, he tenido la suerte de ser voluntario en Berakah, el programa social de la diócesis ayudando a las personas más necesitadas de la ciudad durante el confinamiento. ¡Una experiencia inolvidable!
Nos podéis seguir en la cuenta de Instagram, @grupogazteok y enteraros de todas las novedades. ¡Hagamos lío!
Yasel Fermín
Delegada de Pastoral con Jóvenes
Vitoria-Gasteiz, 30/11/2020