Datos con Rostro, marzo 2015
Unidos a Dios escuchamos un clamor
“El imperativo de escuchar el clamor de los pobres se hace carne en nosotros cuando se nos estremecen las entrañas ante el dolor ajeno. Releamos algunas enseñanzas de la Palabra de Dios sobre la misericordia, para que resuenen con fuerza en la vida de la Iglesia. El Evangelio proclama: ‘Felices los misericordiosos, porque obtendrán mise¬ricordia’ (Mt 5,7)”.
FRANCISCO, Exhortación Apostólica, Evangelii Gaudium. La alegría del Evangelio, nº 193
Para cualquier sugerencia, mayor profundización en los datos presentados o más información, consulta Mundo Obrero e Iglesia, del Secretariado Social Diocesano.