El Obispo de Vitoria ha designado la Parroquia de Nuestra Señora Madre de los Desamparados como uno de los nueve templos jubilares de la Diócesis de Vitoria. En nuestro caso, gracias al vínculo «espiritual y físico» que nos une con la sede de Cáritas Vitoria.
En este año Jubilar, el Papa Francisco nos invita a buscar encuentros con Cristo que revitalicen nuestra existencia; nos anima a peregrinar desde la esperanza, para que sea un año de fortalecer nuestra fe.
“Oremos para que este Jubileo nos fortalezca en la fe, nos ayude a reconocer a Cristo resucitado en medio de nuestras vidas y nos transforme en peregrinos de la esperanza cristiana”. Papa Francisco
«La esperanza cristiana es un regalo de Dios que llena de alegría nuestra vida. Y hoy, ¡la necesitamos tanto! Cuando no sabes si mañana vas a poder dar de comer a tus hijos, o si lo que estás estudiando te permitirá tener un trabajo digno, es fácil caer en el desánimo. ¿Dónde buscar la esperanza? La esperanza es un ancla. Un ancla que vos la tirás con la cuerda y arraiga en la playa. Y nosotros tenemos que estar aferrados a la cuerda de la esperanza. Bien agarraditos», explica el Papa
“El Jubileo puede ayudar mucho a restablecer un clima de esperanza y confianza, como signo de un nuevo renacimiento que todos percibimos como urgente. Por esa razón elegí el lema Peregrinos de la Esperanza” Papa Francisco
«Ayudémonos unos a otros a descubrir este encuentro con Cristo que nos da la vida y pongámonos en camino como peregrinos de la esperanza para celebrar la vida y dentro de la vida entra también el próximo jubileo como una etapa. Llenemos nuestro día a día con el don que Dios nos da de la esperanza y permitamos que a través de nosotros llegue a todos cuantos la buscan. No se olviden: la esperanza no defrauda nunca. Oremos para que este Jubileo nos fortalezca en la fe, nos ayude a reconocer a Cristo resucitado en medio de nuestras vidas, y nos transforme en peregrinos de la esperanza cristiana».
Carta del Obispo
Mons. Juan Carlos Elizalde, en su carta de anuncio del Jubileo 2025 a la Diócesis de Vitoria, señaló ls templos jubilares de nuestra Diócesis, en sus horarios habituales, serán:
– Catedral de Santa María
– Concatedral de María Inmaculada, Madre de la Iglesia
– Parroquia de San Miguel, Santuario de la Virgen Blanca
– Santuario de la Virgen de Estíbaliz
– Santuario de la Virgen de Angosto
– Santuario de la Nuestra Señora de la Encina de Artziniega
– Capilla de la Virgen del Pilar de la Parroquia de San Juan de Laguardia
Y siguiendo las indicaciones del Santo Padre y a tenor del Decreto de la Penitenciaria Apostólica de fecha 13 de mayo de 2024 sobre la concesión de la indulgencia durante el Jubileo Ordinario de 2025, he designado dos lugares para practicar obras de misericordia y lograr la indulgencia plenaria:
– La sede de Cáritas Diocesana vinculada a la Parroquia de Nuestra Señora de los Desamparados;
– Y la sede de Berakah, vinculada a la Parroquia de Santa María.
Sin detrimento de las peregrinaciones individuales, os recomiendo las comunitarias para crecer «como granos que hacen el mismo pan». Que los templos jubilares sean lugares santos de acogida y espacios privilegiados para generar esperanza, como dice el Papa. Allí estamos llamados a ser signos tangibles de esperanza para otros, al tiempo que peregrinos de la esperanza. Según la Penitenciaría Apostólica, se puede lucrar la Indulgencia plenaria con las siguientes condiciones:
– Peregrinación a Roma o a los templos jubilares de la Diócesis.
– Celebración del Sacramento de la Reconciliación.
– Eucaristía y Comunión.
– Oración por las intenciones del Papa.
– Y un gesto de compartir los bienes a través de una limosna.
Las Normas de la Penitenciaría aclaran que la Indulgencia está «vinculada también a las obras de misericordia y penitencia». Se invita a los creyentes a redescubrir las obras de misericordia corporales y espirituales. En la Diócesis de Vitoria, propongo que este gesto lo podamos realizar a través de la colaboración en los proyectos sociales y pastorales de nuestros misioneros en Ecuador en la Diócesis de Portoviejo: Juan Ramón Etxebarria, José Antonio Chávarri y Juan Cruz Donés. Con ellos potenciamos el servicio a los pobres y la pasión misionera.