El Camino Ignaciano en la Diócesis
Esta semana se ha presentado el Camino Ignaciano, que recrea la ruta que san Ignacio de Loyola recorrió el año 1522 desde Loyola hasta Manresa, y permite vivir una experiencia de peregrinación, siguiendo el proceso espiritual que hizo Ignacio.
Es un camino que parte de Loyola y en sus primeras etapas, recorre parte de la diócesis de Vitoria, a la que entra por Araia desde Arantzazu, sigue una nueva etapa hasta Alda, una tercera por Santa Cruz de Campezo hasta Genevilla y una más por Cripán termina en Laguardia.
Es un camino que coincide con el Camino a Santiago desde Cataluña, pero en sentido contrario, como hizo Ignacio, a contracorriente. En la página del Camino Ignaciano hacen esta propuesta:
Hoy te proponemos con esta guía vivir la experiencia de Ignacio, a contramarcha. Te cruzarás con otros peregrinos, porque el suyo es también nuestro camino… pero en el sentido contrario a las flechas amarillas que apuntan a Santiago y que irás encontrando en tu trayecto. Al igual que Ignacio de Loyola, nosotros buscamos otro horizonte, otro destino. Tal vez deseamos llegar a Jerusalén, como él, ¿por qué no? Pero antes de eso, te animamos a que llegues hasta Manresa, hasta la Cueva, y que hagas como Ignacio un parada en tu vida, para descubrir cómo Dios enseña a caminar “como si fuese nuestro maestro”, tomándonos de la mano.