El Señor ha llamado a José María García Rodrigo
En la mañana del martes 9 de abril fallecía a los 86 años de edad en el hospital de Santiago Apóstol de la capital alavesa el sacerdote de nuestra Diócesis D. José María García Rodrigo. Nacido en 1938 en la localidad alavesa de Nanclares de la Oca, fue bautizado a los pocos días de nacer en la parroquia de la Asunción de Nuestra Señora de esta misma localidad el día 27 de marzo de 1938.
Realizó los estudios eclesiásticos en el Seminario Diocesano de Vitoria y fue ordenado presbítero en la parroquia de se pueblo natal el 17 de junio de 1962 por el Obispo de Vitoria, Mons. Francisco Peralta.
Su primer destino nada más ser ordenado fueron los pueblos de Arrieta, Golernio y Doroño. En 1963 el Obispo le nombra auxiliar de la parroquia de San Pedro de Llodio y encargado de las parroquias de San Román de Okendo y Santa María del Yermo.
En el año 2008 el Obispo Asurmendi le nombra párroco de las parroquias de Llodio y Areta junto con la de Santa María del Yermo y ya en 2018 pasa a ser colaborador de las parroquias de la zona de Ayala.
En este comarca, especialmente en Santa María del Yermo, permaneció D. José María García como responsable desde los 25 años, y hasta poco antes de su fallecimiento, con 86 años.
Los que lo conocen, especialmente en la zona de Llodio, destacan su sencillez y su vocación de servicio como sacerdote. El actual párroco de esta localidad ayalesa, José Luis Kareaga, lo define como un “confidente, un padre, un hermano y un modelo de sacerdote bueno y sencillo”. El que es conocido como gran defensor y promotor de Santa María del Yermo, popularmente conocida como la iglesia de Santa Lucía, logró crear una comunidad alrededor de este templo. En Santa María del Yermo, Jose María García hizo una trabajos de restauración para su mantenimiento, promocionando así este templo no solo en Llodio y en los pueblos de la zona, sino en gran parte de Álava y otras provincias.
Tal es así, que esta cura hizo que el pórtico de Santa María del Yermo fuese lugar de encuentro y celebración de decenas de vecinos de caseríos, los cuales todos los domingos celebran misa a las 11:30h gracias a la labor de este párroco. “Creó comunidad y hoy se mantiene con celebraciones de todo tipo, como candelas, San Blas, Navidad, cumpleaños o bautizos”, destaca Kareaga.
El funeral por el eterno descanso de su alma se celebró el miércoles, 10 de abril, a las 18:30h, en la Parroquia Asunción de Nuestra Señora de Nanclares de la Oca, su pueblo natal, donde fue enterrado. Presidió esta misa el Obispo de Vitoria, Mons. Juan Carlos Elizalde.
Rogamos una oración por su alma para que el Padre lo acoja en la morada eterna.