Domingo II T.Nav.(A)
Jesús es la Palabra y la Palabra se hace carne. Jesús vivió como nosotros, fue uno de nosotros y, por eso, tenemos también la posibilidad, la oferta, el reto… de vivir como Él vivió, para lo que Él vivió. También nosotros podemos y debemos encarnarnos en la realidad, en la Historia, en la Iglesia y continuar la vida de Jesús, la obra de Jesús.