Misa Crismal: primer encuentro del Obispo con los sacerdotes diocesanos
La Misa Crismal ha reunido en la cripta de la Catedral Nueva al nuevo Obispo de Vitoria, Juan Carlos Elizalde, con los sacerdotes y diáconos de la diócesis. Esta misa es la celebración —presidida por el Obispo y concelebrada con los presbíteros de la diócesis— en la que se consagra el Santo Crisma y bendicen los restantes óleos (aceites) —de los catecúmenos y de los enfermos—. Ha de ser tenida como una de las principales manifestaciones de la plenitud sacerdotal del obispo y como un signo de la unión estrecha de los presbíteros con él.
En esta ocasión se trataba además del primer encuentro del recién ordenado obispo, Monseñor Elizalde, con todos los sacerdotes de la diócesis. Un momento que ha querido aprovechar para manifestarles su cercanía, como sacerdote y Obispo y para recordar que son "tiempos apasionantes para vivir el sacerdocio".
Las lectura del Evangelio de Lucas 4, 16-21 hace referencia la momento en el que Jesús, en la sinagoga, lee el pasaje: “El Espíritu del Señor está sobre mí, porque me ha consagrado para llevar la buena noticia a los pobres; me ha enviado a anunciar libertad a los presos y a dar vista a los ciegos;a poner en libertad a los oprimidos; a anunciar el año favorable del Señor.” Y anuncia: "Hoy mismo se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros".
Al finalizar la celebración el Obispo ha obsequiado a cada sacerdote y diácono con una recopilación de los textos sacerdotales del Papa Francisco en sus tres años de ministerio al frente de la Iglesia Universal, con una presentación del propio Obispo:
El Señor, a través del Papa Francisco, está poniendo unos acentos muy concretos en nuestra identidad sacerdotal hoy. El sacerdote que la Iglesia hoy necesita está magistralmente cincelado en estas páginas. La diócesis de Vitoria ha tenido y tiene una especial sensibilidad en cuanto a espiritualidad sacerdotal se refiere. (...) Me alegro de poder compartir con vosotros este tesoro.