Mochilas para ayudar a menores en Camerún
La tienda Bide Bidean ha puesto a la venta mochilas elaboradas por jóvenes que cumplen condena en la prisión central de Yaundé, en Camerún, y cuyas condiciones de vida han sido muy polémicas debido al hacinamiento, a las malas condiciones de higiene y a la pobre alimentación, lastrando así la salud de los reclusos.
Las Hermanas de la Compasión lideran un proyecto que crearon en 1977 bajo el nombre 'Hogar de la Esperanza' un centro socio-educativo con la vista puesta en ayudar a la infancia y adolescencia en dificultades.
Tras la aprobación de las autoridades penitenciarias de Camerún, las monjas han comenzado un nuevo proyecto dentro de la prisión para acompañar a menores con el objetivo de preparar su salida y su reinserción social. Les ayudan en su alfabetización y formación profesional así como en el ámbito jurídico, alimenticio, sanitario, cultural y deportivo. Otro de sus objetivos es potenciar el vínculo entre los menores y sus familias como un lazo importante en la posterior situación tras la salida de prisión. Este nuevo proyecto de fabricación de mochilas, riñoneras o pequeños estuches y carteras va encaminado a seguir en ese proceso de reinserción para que muchos adolescentes se especialicen en el sector textil y puedan seguir tras abandonar la prisión. Muchos de estos jóvenes serán acogidos en el ‘Hogar de la Esperanza’ ante la falta de alternativas que dignifiquen su futuro, evitando de esta manera que caigan en círculos de delincuencia, drogadicción o alcoholismo.
Por ello, la Diócesis de Vitoria, a través del proyecto de Comercio Justo Bide Bidean, quiere apoyar a estos chicos mediante esta iniciativa de estas Hermanas en Camerún. Así, se ponen a la venta estas mochilas que han sido elaboradas en esta prisión por estos jóvenes y cuya recaudación irá destinada al ‘Hogar de la Esperanza’ donde viven y se forman miles de menores desde los 9 años, desamparados de la calle y muchos llegados de esta cárcel.
La fundación de la Congregación de las Hermanas de Nuestra Señora de la Compasión se remonta a 1817 en la ciudad francesa de Toulouse. Allí, el sacerdote Maurice Garrigou y la religiosa Jeanne Marie Desclaux, afectados por la situación hostil a consecuencia de la Revolución Francesa, sufren persecución, cárcel y clandestinidad, algo que les marcó en su vida de fe llevándoles a crear esta congregación dedicada a los más pobres y necesitados para hacerles llegar la compasión de Jesús a través de la inclusión, la salud y la educación. Estas religiosas, presentes a día de hoy en tres continentes –Europa, América y África– tienen una comunidad en Vitoria desde donde colaboran con la Diócesis desde 1969 especialmente a través de Misiones Diocesanas debido a la presencia y vocación misionera de estas religiosas.
Las mochilas están hechas a mano, revisadas para un buen rendimiento y muchas elaboradas con telas oriundas de Camerún con sus tradicionales colores. Los precios oscilan entre los 20 y 30 euros, los cuales irán íntegros a los proyectos para niños y niñas menores liderados por las Hermanas de la Compasión presentes en este país africano desde 1965.