Evangelio del día: «Ascendió al cielo y se sentó a la derecha de Dios». Mc16,15-20

Palabras del Obispo de Vitoria en las Solemnes Vísperas de la Virgen Blanca

 

Palabras del Obispo de Vitoria en las Solemnes Vísperas de la festividad de la Virgen Blanca, patrona de Vitoria

 
Estamos en las Vísperas de la Virgen Blanca. Es el estallido de la fiesta, el comienzo de nuestros días grandes. "Alégrate llena de gracia, el Señor está contigo". Esta es la causa de nuestra alegría: El Señor está. Y eso te llena de gracia, de alegría, de sentido, de vida. Vales porque vales para el Señor. Él está contigo. Una alegría que nadie te puede arrebatar.
 
La alegría incontenible de la Virgen en Nazareth llena ahora esta parroquia de San Miguel, Santuario de la Virgen Blanca. La ciudad entera se llena de alegría porque tiene madre y si hay madre hay esperanza. La Virgen Blanca es Patrona y Madre de Vitoria-Gasteiz y hoy símbolo de la ciudad para todos.
 
Jesús, "nacido de mujer", dice San Pablo. (Gal. 4,4) Una mujer en el centro de la fiesta. Un mujer es el motivo de la fiesta. La mujer es el santuario de la vida y la condición de la supervivencia. Cuando la mujer es central, hay vida, hay familia, hay crecimiento y hay comunidad. Fiestas de la Blanca que reparan la marginalidad de la mujer tantas veces consentida. Fiestas que reclaman la igualdad de la mujer no sólo jurídica sino también sociológica, laboral, real y verdadera.
 
También la Iglesia es femenina, dice el Papa Francisco, y la mujer también tiene que estar donde se toman las decisiones importantes, de hecho la culminación y cumbre de la Iglesia es una mujer.
 
Las fiestas de la Virgen Blanca para celebrar la fiesta de la Madre y por tanto para consolidar la centralidad de la mujer hoy y siempre, para reconocer su presencia específica y cualificada también en la Iglesia, en nuestra Diócesis y en nuestras comunidades.
 
"Alégrate llena de gracia, el Señor está contigo". Que esta alegría nos acompañe en las fiestas hoy y siempre.
 
 

+ Juan Carlos Elizalde
Obispo de Vitoria

Vitoria-Gasteiz, Iglesia de San Miguel, 4 de agosto de 2019

 

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