Esta Navidad, tienes que visitar nuestro Belén. El momento ideal para disfrutarlo es justo después de las celebraciones. Aquí puedes ver algunas fotografías representativas del Nacimiento recreado por Aitor Sobrón. ¡Te esperamos! Consulta el horario de las misas.

«El Niño Jesús, nacido en Belén, es el signo que Dios dio a los que esperaban la salvación, y permanece para siempre como signo de la ternura de Dios y de su presencia en el mundo» Papa Francisco

Aunque ya se aprecian representaciones de la Virgen María con el niño en brazos en las catacumbas, fue san Francisco de Asís en el año 1223 quien tuvo la iniciativa de representar la escena del nacimiento de Jesús utilizando personas y animales de verdad; esto le ayudaba a considerar la realidad del misterio del nacimiento de Nuestro Señor. La idea se hizo costumbre en la Iglesia y hoy día, en nuestros hogares, en nuestras parroquias y en tantos lugares del mundo celebramos la Navidad montando nuestro Belén.

Texto del Evangelio (Lc 2,1-14): Sucedió en aquellos días que salió un decreto del emperador Augusto, ordenando que se empadronase todo el Imperio. Este primer empadronamiento se hizo siendo Cirino gobernador de Siria. Y todos iban a empadronarse, cada cual a su ciudad. También José, por ser de la casa y familia de David, subió desde la ciudad de Nazaret, en Galilea, a la ciudad de David, que se llama Belén, en Judea, para empadronarse con su esposa María, que estaba encinta. Y sucedió que, mientras estaban allí, le llegó a ella el tiempo del parto y dio a luz a su hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo recostó en un pesebre, porque no había sitio para ellos en la posada.

En aquella misma región había unos pastores que pasaban la noche al aire libre, velando por turno su rebaño. De repente un ángel del Señor se les presentó; la gloria del Señor los envolvió de claridad, y se llenaron de gran temor. El ángel les dijo: «No temáis, os anuncio una buena noticia que será de gran alegría para todo el pueblo: hoy, en la ciudad de David, os ha nacido un Salvador, el Mesías, el Señor. Y aquí tenéis la señal: encontraréis un niño envuelto en pañales y acostado en un pesebre». De pronto, en torno al ángel, apareció una legión del ejército celestial, que alababa a Dios diciendo: «Gloria a Dios en el cielo, y en la tierra paz a los hombres de buena voluntad».