Los santos de la puerta de al lado — 18 mayo, Día del Laicado
Como todos sabéis, este curso hemos tomado el tema de la fragilidad como nuclear. Es una palabra con muchas connotaciones y riqueza. Sobre ella hicimos el encuentro del laicado en el seminario. Desde allí comprendimos, que la Palabra tiene autoridad entre otras cosas, porque habla desde la fragilidad.
El Reino de Dios es de los frágiles, ellos son los bienaventurados, pero ¿cómo vivir con esa fragilidad, como acompañarla? Ahí está la clave de nuestro vivir cristiano. Hemos de saber vivir nuestra propia debilidad y acompañar la de los demás, así como luchar con todas nuestras fuerzas para que la justicia recaiga sobre los más necesitados, sobre los preferidos de Dios.
La última exhortación del Papa es de una riqueza extraordinaria y nos da claves en este sentido. Lo más rico quizás sea que nos muestra cómo desde la vida cotidiana podemos y debemos “ser santos”, cada uno desde aquello a lo que se siente llamado, y desde donde está, desde su trabajo, sus vecinos, sus hijos,...
Nos aleja de los modelos de los altares, para mostrarnos como hizo Jesús, que es en la calle y en el día a día donde nos jugamos el Reino.
Día del Laicado - Pentecostés
viernes 18 de mayo a las 19:30 h.
Aula San Pablo. C/ Vicente Goicoechea, 5 (entrada por la Librería Diocesana)
Habrá guardería para que puedan asistir las familias
La llamada de Dios es personal, y la vamos a descubrir de mil maneras: en el hermano, en la palabra, en la calle, en la realidad,… A nadie le pide lo que no puede dar, y a nadie le susurra lo mismo que al de al lado. Por ello, no debemos dejarnos guiar por modelos inalcanzables, o pensar que todo cristiano debe hacer tal cosa. Dios nos lo pone más fácil, Él se encarga de susurrarnos o de ir mostrándonos qué, cómo, por dónde… y nosotros sólo tenemos que estar atentos y intentar dar respuesta a aquello que intuimos que está bien, que crea Reino, que hace la vida más digna, que ayuda al hermano, ”Todos estamos llamados a ser testigos”. Si lo fueron los discípulos, que tampoco tenían preparación ni grandes cualidades, ¿cómo no lo vamos a ser nosotros? No sería cosa de Dios, si sólo podrían ser testigos los listos, los sabios, los entendidos.
Desde esa convicción queremos daros unas claves para la lectura de la última exhortación del Papa, acercarla a cualquier persona que la quiera leer, para descubrir cómo Dios está en “la puerta de al lado”, no en los cielos. Por ello os invitamos al acto que tendrá lugar el viernes 18 de mayo a las 19:30 h. en el Aula San Pablo. C/ Vicente Goicoechea, 5 (entrada por la Librería Diocesana). Después compartiremos vida con un picoteo.
