Silencio

Roto el sentimiento,
el cuerpo dolorido
partida el alma
gimiendo los sentidos
¡cómo te he gritado,
Dios escondido,
esparciendo mis voces
por el espacio vacío!
Tan ronco está mi silencio
que no pareciera mío.

No me explico este milagro
pero vivo.

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